Estudié Medicina en la Universidad de Zaragoza ( España ) me encantó, la carrera y la ciudad. Allí conocí a la persona que hoy es mi mujer y a otra gente con la que compartí amistad y tiempo. Pasé un año después, en Barcelona, llamado por mi país durante un año para hacer lo que se llamó «la mili». Tiempo de experiencias. Y el tiempo siguió corriendo, un año encerrado estudiando y la vida me llevó a Asturias a formarme como psiquiatra. Aquí estoy, con el tiempo dejando su rastro en mi pelo, intentando aprender de las personas que como pacientes voy conociendo y viviendo cada vez con más ganas de estar en nuestro mundo, que convulso, confuso y rápido, merece siempre la pena de ser vivido y sentido. Luego nacieron dos personajillos, primero pequeños hoy grandotes, que consiguieron desquiciarme en algún momento, mientras los amaba entre el descubrimiento, la alegría, los sueños y siempre el perdón, pero esto si lo cuento será otro día.